El inicio de la aventura

Me sorprendí por lo que me preguntó Alice.

-¡Pero si lo llevo diciendo desde que nos conocimos en Vergel Radiante!

Negué con la cabeza, y miré hacia ella con una sonrisa.

-Bueno, no hace daño contar la historia de nuevo...o mejor dicho, decir los detalles...

La calma del lugar era perfecta para poder seguir hablando un rato...me puse de pie y miraba al cielo, tratando de recordar lo ocurrido de nuevo, y simplificarlo.

-Hace doce años vivía en Vergel Radiante. Justo entonces me llego un mal día. Unos seres oscuros, si bien recuerdo sincorazón, me secuestraron y terminé en no tengo idea que lugar. De ahí, no recuerdo nada, hasta el día en que salí de un portal oscuro. Entonces yo tenía ya 18 años, habían pasado 12 años, no tenía idea de que fue de mí en todos eso años, y aprendí a usar la keyblade: no se como. Lo único que no logro recordar son ésos 12 años perdidos. Quiero saber como aprendí a usar la keyblade, y donde estuve. Mas bien, que me impediría regresar a casa. ¡Digo! Viajar entre mundos no es algo TAN complicado...pero es que tengo mis dudas...respecto a todo.

Terminé con mi barbilla apoyada en mi puño derecho, y el brazo derecho recargado en mi brazo izquierdo, mientras miraba ahora al suelo de manera pensativa, y me volvía hacia ella.

-Por eso de Merlín supe del señor "Yen Sid". Un mago con grandes conocimientos, sobretodo de la keyblade y otros mundos.

Me sentía un poco tonta por no recordar que el dijo eso en vergel radiante,sinceramente no recordaba que el hubiese dicho eso, y sentía que también lo había ofendido.

-Oh, lo entiendo -puse una mano sobre su hombro- te ayudaré en la manera que me sea posible, los recuerdos son algo muy importante, ya que si no sabemos en donde estuvimos, qué hicimos y a quienes conocimos, es muy probable que no sepamos qué será de nuestro futuro.
¿por ahora qué necesitas?

-Bueno, ordenándolo y viendo lo que tengo que hacer...-dije cruzado de brazos y viendo al cielo.-¡Quiero encontrar el mundo donde vive Yen Sid!-sonreí hacia ella, enérgicamente.-Y después volveré a Vergel Radiante. Por un rato o para siempre...depende de lo que aprenda de Yen Sid. ¿Vale?-ahora sonreí gentilmente, y bajé un poco la mirada. Después la levanté de nuevo, mirando a Alice con una gran curiosidad...

-Bueno, espero y me respondas mi pregunta...

Me agaché enfrente de ella, mirándola con confusión.

- ¿Cómo llegamos a éste mundo y cómo salimos de Vergel Radiante? Por que yo no lo recuerdo...

Me quedé pensativa un momento y con cara de asombro lo miré
-¿No lo sabes?
Me paré y saqué mi keyblade, de esta se abrieron unos rayos de luz que eran pequeños pero podrían iluminar bien un cuarto grande.
Luego las luces se alargaron haciendo una especie de palos de luz y luego se extendieron a lo que parecían puertas.
-yo llegué así, pero puedes comprar una nave -señalé las naves- te tardas menos tiempo pero yo no tengo dinero.

Aprendía rápidamente el cómo me transportaba, y como podría. Pero me detuve a pensar un momento, y miré hacia ella...

-¿Viajarás por ése medio?

Comprendía que ella poseía cierto poder, pero yo no. Tendría que viajar de alguna manera, aunque fuese por mi cuenta.

-Entonces aquí nos despedimos por un rato...al menos hasta encontrar ése mundo...

Me dí la vuelta, para no verle su expresión ni que ella viera la mía.

-Iré a ver que puedo conseguir. Y pronto ir a donde tenga que ir.

Salí corriendo en dirección al pueblo, a ver que podía lograr. Si podía conseguirme una "nave".

Me senté un poco a tomar agua en una banca que estaba cerca de una fuente a la cual las personas estaban tirando monedas y pidiendo deseos, sinceramente yo nunca había creído en esas cosas, aunque pedir de vez en cuando no estaba mal.
me paré después de mi corto descanso y saqué mi keyblade, abrí un portal de de luz de la misma forma en la que le había mostrado a firion como llegué ahí para evitar el daño que pudiese haber pasado en vergel radiante; de esta forma volteé a atrás y vi a Ailus hablando con un vendedor, al parecer aún no se enteraba de que los keybladers podemos viajar entre mundos, lo cual me pareció gracioso.
entonces entré en el portal y me fuí

Spoiler:

-...¡¿Cu-cuánto?!

Mi quijada estaba por los suelos al oír cuánto costaba la más barata de las naves. Claro, no tenía el dinero. Eso, o me querían tomar el pelo. Aún así, decidí mejor regresar a la plaza principal. Alcancé a ver por un momento a Alice, que se adentraba en ése portal, y se iba de éste mundo...

-Vaya, llegando tarde...

Con una mirada algo triste, decidí comprar un helado en una tienda cercana, y sentarme cerca del kiosko. Un pacífico lugar...definitivamente...
Tan pronto terminé con mi helado, noté que tenía algo inscrito en el palo de madera: GANADOR. No tenía idea de que trataba, pero mejor me lo llevé al bolsillo. Disfrutaba un poco de la calma que había, cuando pude ver algo corriendo por uno de los rincones.

-¿Un Sincorazón? ¿Era ése un "Sombra"?

Comencé a perseguirlo, corriendo detrás de él hasta la pista de carreras. Justo entonces, otras cuatro aparecieron. Eran distintas: mas pequeñas, rápidas y de ojos rojizos. ¿Que eran ésas cosas?

-¡Pues sea lo que sea, no me parecen para nada amistosas!

Tomé la keyblade, y corrí hacia ellas, esquivando el ataque de la primera, y acertando con una tajada horizontal certera. Me abalancé por los dos que estaban a mi derecha, dando otro corte hacia arriba, y acabando con ambos de un golpe. Pero por mi espalda, ambas criaturas me atacaron fuertemente, quedándome un poco quedo por la herida. Pero aguantando el dolor, salté hacia ellos, dando un corte horizontal al primero, y al último lanzando mi llave hacía éste, para desaparecer en el aire.

-Hmm...ésas cosas eran sin duda "algo oscuro". ¿Pero que eran? Da igual...espero que solo haya sido por ésta vez...

Me quedé pensativo con éso último que dije...y me vino a la mente la pelea que hubo entre James y Firion, junto a Alice y yo. Alice había huido usando un portal similar, Firion huyó del castillo a tiempo...James desapareció y yo fui tragado por ésa oscuridad, despertando aquí.

-¡Entonces hay medios para viajar! Alice tiene uno, y James otro...eso significa...que yo también podría tener uno...

Al terminar ésta reflexión, invoqué mi keyblade, y la alcé, esperando poder lograr algo. Pero sin duda, ninguna reacción.

-No servirá de nada el solo pensarlo. Debo de...debo de...

Ésta vez, cerré mis ojos, y levanté mi keyblade. "Necesito saber éso...y para ello, tengo que viajar...quiero ir a donde tenga que ir..." decía en mi cabeza. Respiré profundamente, y sentí una rara sensación. Era como entre volar e ir cayendo. Como ser jalado por algo. No sabía que era, hasta que abrí los ojos. Estaba en un extraño lugar. Un lugar amplio, algo oscuro, pero con demasiadas estrellas y con algo que me llamaba la atención: podía ver todos los mundos. Era algo que no había visto antes. Veía distintos mundos: coloridos, oscuros, brillantes, indescriptibles. Pero como dije, era jalado hacia quien sabe donde. Sentía que me alejaba de un calor enternecedor, y me adentraba a las frías sombras que antes había sentido.
Me equivocaba. Estaba entre una y otra...no se a donde me dirigía, hasta que pude ver los colores cobrizos y rojos sobre éste mundo...Un mundo con una torre del reloj.